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El Paso, Texas, se encuentra en el umbral de una tercera oleada de llegadas de migrantes, y los refugios locales están superando su capacidad. Según la directora de Comunicación Estratégica de El Paso, Laura Cruz-Acosta, la región ha experimentado un incremento significativo en el número de inmigrantes en la frontera, con un promedio de 1.200 encuentros diarios. Las organizaciones no gubernamentales, las autoridades municipales y locales están recibiendo a más de 1.100 personas al día. En los últimos siete días, la ciudad de El Paso ha brindado refugio a más de 4.200 inmigrantes a través de hoteles. La Oficina de Gestión de Emergencias está operando actualmente hoteles con más de 900 migrantes, proporcionándoles comida y refugio mientras esperan su viaje.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) ha enviado un comunicado a CNN indicando que están trabajando de acuerdo a su plan para descomprimir rápidamente las áreas a lo largo de la frontera suroeste. Su objetivo es procesar a los inmigrantes y colocarlos en los procedimientos de aplicación de inmigración en consonancia con las leyes estadounidenses.
El sur de California también ha experimentado un aumento en la llegada de migrantes en los últimos días. Aproximadamente 2.000 migrantes han llegado al condado de San Diego en la última semana. Grupos de ayuda de inmigrantes, como el Immigrant Defenders Law Center, están trabajando para proporcionar recursos adicionales a estos migrantes. Sin embargo, la llegada repentina de migrantes sin previo aviso ha generado dificultades en la región. El alcalde de la ciudad de El Cajón, ubicada a unos 27 kilómetros al este de San Diego, ha calificado la situación como un desastre. Las salas de emergencia están al límite de su capacidad y los refugios para personas sin hogar están llenos. Los recursos están al límite.
La crisis migratoria en El Paso, Texas, y sus alrededores presenta un desafío importante debido a la falta de recursos disponibles para atender a la creciente cantidad de migrantes. Muchas de estas personas no tienen los medios para movilizarse hacia otras partes del país y llegar a su destino final. Esto ha llevado a un aumento en las liberaciones de inmigrantes en las calles, generando una situación de cuello de botella. Los migrantes se ven obligados a permanecer en El Paso por más tiempo debido a la falta de recursos para continuar su viaje. La situación es especialmente difícil para los adultos solteros, ya que los refugios dan prioridad al alojamiento de mujeres y niños.
En conclusión, El Paso, Texas, se enfrenta a una crisis migratoria sin precedentes. El aumento de inmigrantes en la frontera ha llevado a una sobrepoblación de los refugios locales, lo que ha llevado a la necesidad de buscar alojamiento alternativo, como hoteles. La respuesta de la CBP es procesar a los inmigrantes de acuerdo con las leyes estadounidenses. Además, el sur de California también ha experimentado un aumento en la llegada de migrantes, lo que ha generado dificultades adicionales en la región. La falta de recursos para atender a esta creciente población de migrantes es un desafío significativo que debe abordarse de manera urgente.