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En la madrugada del pasado domingo, la Plaza Honduras de Valencia fue escenario de una violenta batalla campal que dejó a seis personas detenidas y varias heridas. Vecinos y transeúntes quedaron atónitos al presenciar cómo un grupo de entre 20 y 30 hombres se enfrentaban con palos, martillos y otros objetos contundentes. La escena era caótica, con personas lanzándose botellas, vasos de cristal, piedras y adoquines. La Policía Local tuvo que intervenir y solicitar refuerzos para controlar la situación.
Aunque se desconocen los motivos exactos que desencadenaron esta violenta pelea, los vecinos relatan que la mayoría de los participantes eran ciudadanos paquistaníes. Según testigos, la disputa podría estar relacionada con el control de los locales de ocio de la zona. Los dueños de los kebabs y los trabajadores de un pub cercano se habrían enzarzado en una pelea que llevaba meses gestándose, según denuncias de los propios vecinos.
Cuando la Policía Local llegó al lugar de los hechos, los agentes intentaron disuadir a los agresores gritándoles para que cesaran la violencia. Sin embargo, tuvieron que hacer uso de sus defensas policiales reglamentarias para dispersar a los participantes en la pelea. Algunos de ellos huyeron corriendo por las calles cercanas, mientras que otros fueron localizados frente a un pub en la calle Serpis. Seis hombres de nacionalidad paquistaní, con edades comprendidas entre los 27 y los 51 años, fueron detenidos y trasladados a dependencias policiales.
Los vecinos de la Plaza Honduras llevaban meses advirtiendo sobre la tensión y los problemas de convivencia en la zona. Denuncian que esta disputa entre los locales de ocio ha generado un ambiente de inseguridad y ha afectado negativamente al precio de las viviendas. Ante estos hechos, la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha pedido a la delegada del Gobierno que refuerce la presencia policial en la ciudad y ha anunciado que se está trabajando para aumentar el número de plazas en la Policía Local.
Es fundamental que las autoridades tomen medidas para resolver este conflicto de manera pacífica y duradera. La seguridad de los vecinos y la convivencia en la zona deben ser prioritarias. Es necesario establecer un diálogo entre las partes involucradas y buscar soluciones que permitan un ambiente seguro y tranquilo en la Plaza Honduras. La presencia policial debe ser constante y efectiva para prevenir futuros enfrentamientos y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos. Solo así se podrá recuperar la tranquilidad en esta zona de ocio de Valencia.